Espesa la carga de agua,
densa lluvia que todo humedece,
densa lluvia que todo humedece,
reverdece los campos,
se abren las rosas,
los lirios florecen
de sangre las amapolas,
de amarillo y naranja
se llenan los verdes
y el corazón en un suspiro
torna a su latido fuerte,
después de encogido
por la grave tormenta.
Brillan los campos de verde,
promesa que aletea
y suenan los trinos de tu
alma que, pasados los rayos,
¡pájaro libre!
a lo alto y en alto se vuela
4 comentarios:
Preciosa poesia... cortita pero intensa... me recuerdas algún poeta... que ahora mismo no caigo...
Un beso enorme mi vida...
Bravo! Militos, cómo me ha gustado! estoy segura que tu poema tiene los colores de tu alma, fuertes, vivos y alegres.
..mi alma ha volado con tu poesía
muchos besos,
Vivir: Te confieso que me da mucha alegría verte por aquí. ya tu nombre es una invitación a la alegría de vivir.
Un beso
Pues vamos, Ines, a volar juntas.
Muchas gracias.
Besitos
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