Mercurio y Venus cerca del Sol
siempre al calor, a la luz, en ondas
de amor y fuego,
abriendo brazos, abriendo pechos,
abriendo labios,
gritando amor.
Dadme pasiones que envuelvan
en un latir, siempre de firme,
inacabado...
que amaine, que encienda,
que vuelva en estrellas
la estepa árida de este vivir
que no esperaba que no pensaba
nunca... fuera en mi.
Hoy me lo trajo la polvareda
de un desierto cercano,
sin luz ni estrellas
cubriendo a Venus,
tapando al Sol.
En bocanadas de nebulosa,
tragó lo que antes era
volcán fogoso de mi pasión.
Llevó tan lejos aquella hoguera,
aquel caput,
donde vivía en azucenas
de ramo alzado, toda de aromas,
toda de fuego, luz y fulgor.
Hoy de rebote, cierro la puerta
al firmamento, cierro y
me voy...
AMANECE EN LA ALTA EXTREMADURA
Hace 4 días
3 comentarios:
Bonito blog.
Bss.
PD.- Sí, soy cántabro. Tengo allí mucha familia.
Ah, y añado que mis poemas los publico en el blog "Tiempo a destiempo"
http://yozuniga.blogspot.com/
Gracias Zúñiga, seguro que somos parientes.
Voy a ver tu blog.
un beso
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